Estoy muy emocionada de finalmente tener un espacio más personal para escribir.
Llevo casi 10 años compartiendo mi blog en redes sociales, pero llegar a este día implicó superar muchas barreras y mis propios miedos. Emprender se trata precisamente de eso. Quizás ya te lo haya contado o lo encuentres en mis otros contenidos: comencé a trabajar a los quince años. Aunque hubiera preferido solo estudiar hasta el doctorado, la experiencia laboral y la vida me han enseñado valiosas lecciones y habilidades. ¿Quién diría que terminaría sabiendo tanto sobre ventas? Desde el momento en que empecé acomodando dulces por las tardes. Nunca subestimes a alguien que te indique dónde encontrar un objeto en una tienda, esa es una forma de atención al cliente. Más adelante, pude sentarme con un guion y un micrófono para atender clientes de manera amable y profesional. El siguiente paso tras la atención al cliente es guiarlo para que encuentre lo que necesita. Recuerdo haber trabajado en una tienda de vestidos de gala para pagar mi vestido de graduación de preparatoria. Aunque limpiaba y trapeaba a diario, solo ganaba dinero cuando vendía un vestido, y la comisión era mínima.
Todo eso me llevó a tener el firme deseo de ayudar a otras mujeres. Al principio, necesitas aprender todo sobre tu negocio, pero llega un momento en el que debes buscar a un experto. El tiempo apremia y no permite aprender cada área mientras haces crecer tu negocio rápidamente. En mi experiencia, he pensado en 3 alternativas para ti, desde aprender a hacerlo tú misma hasta recibir ayuda para gestionar tu negocio digital. A lo largo de los años, mis casos de éxito han sido mayoritariamente hombres, quizás porque se enfocan más. Las mujeres vivimos con la presión de múltiples actividades y responsabilidades, desde la falta de recursos hasta la salud. Por ejemplo, cuando una mujer cae enferma en casa, la situación es diferente a cuando es un hombre. Siempre tenemos en mente resolver la vida de todos, es parte de nuestra naturaleza. Esto nos permite brindar una excelente atención al cliente, entendiendo lo que realmente necesitan. Sin embargo, aún busco mujeres enfocadas en su negocio, sin distracciones. He observado que se sienten empoderadas al aprender a vencer los desafíos tecnológicos y mejorar el rendimiento digital de sus negocios. Si me preguntas cuál ha sido el mayor desafío al trabajar juntas, es creer en sí mismas, a pesar de sus dudas y actividades. Mi compromiso con este blog es encontrarte y ayudarte desde la perspectiva de una empresaria, sabiendo que tu constancia y valor sostienen familias en tu negocio, eres la fuente responsable.